
Para el navegante conviene recordar que existe perfectamente consolidada en la costa norte una zona declarada Reserva marina. Y que en todo su ámbito existen en vigor una serie de premisas y condiciones que son de obligado cumplimiento para quienes naveguen por la misma en cuanto a fondeos, el deporte submarino (el fusil ha sido sustituido por la cámara fotográfica), el cuidado del medio, etc.

El documento final original previo a su creación incluía la valoración más actualizada y objetiva que se puede encontrar sobre el estado que presentan los fondos marinos de Menorca y por esta misma causa, el grupo nombrado por el Govern de les Illes Balears para evaluarla, lo asumió en todo su contenido, situándola en la franja comprendida entre Es Cap Gros, en La Vall (Ciutadella) y Sa Punta des Morters, en la Mola de Fornells, al existir extensas áreas cubiertas por praderas de algueros de muy alto interés, y que por su innegable importancia debido a su elevada producción biológica, merecían un alto grado de protección.
La zona acotada ha quedado sometida a la aplicación de una normativa similar a la vigente en otras reservas marinas del país.

Las aguas de Menorca se caracterizan por una transparencia increíble, lo que ha permitido el desarrollo de importantes comunidades marinas al ser sus fondos muy variados y presentar numerosos hábitats favorables para las diferentes familias de la flora y fauna marinas. Gran parte de los mismos se encuentran cubiertos por extensas praderas de Posidonia oceánica.

Estas praderas no son lugares muy frecuentados por los buceadores puesto que la monotonía del ambiente en sí, y un ojo no entrenado, convertirían la inmersión en una aventura bastante aburrida.

Además, el tramo de costa y medio marino acotado coincide en gran parte con zonas declaradas asimismo “Área Natural de Especial Interés” en tierra firme, lo que de algún modo compensa recíprocamente y se puede augurar un futuro altamente prometedor para ambas. En el mismo se encuentran comprendidos diferentes tipos de fondos que, por sus características, pueden permitir perfectamente la regeneración y repoblación de muy diferentes especies de su biodiversidad, muchas de ellas de reconocido interés pesquero, lo que es una de las principales causas de su creación. Precisamente se trata de una zona que no ha sufrido grandes agresiones con la llegada del turismo, conservando el conjunto sus características naturales, ambientales y paisajísticas originales. No existe en sus inmediaciones ninguna instalación de carácter industrial y, por lo que concierne a las aguas inmediatas a la costa, contienen muchos asentamientos de roca, abundando los bajos, escollos, islotes, acantilados y restingas. También posee fondos de arena, que a su vez es recubierta en gran parte por extensas praderas de Posidonia oceánica, representando un hábitat inmejorable para la reproducción y recuperación de muchas especies de la fauna y flora marinas.


Situación geográfica
“Acotaciones: Artículo 1
Límite nororiental: Línea de delimitación de aguas interiores desde la Punta dels Morters (40º 04’15 N / 04º 08’33 E) hasta la intersección de ésta con el Cap de Cavalleria (40º 05’27 N / 04º 05’38 E) y desde este punto hasta la intersección de la línea de aguas interiores con la Illa des Porros (o Illa de Sanitja) (40º 05’45 N / 04º 04’36 E).
Límite noroccidental: La línea de aguas interiores desde la Illa des Porros (o Illa de Sanitja) (40º 05’45 N / 04º 04’36 E) hasta el punto de coordenadas 40º 04’25 N / 03º 56’08 E (balizado) y la intersección del meridiano 04º 08’33 E con la línea de costa (Cap Gros).
Límite sur: La línea de costa entre el Cap Gros (40º 03’50 N / 03º 56’08 E) y la Punta dels Morters (40º 04’15 N / 04º 08’33 E).

La zona comprendida entre los límites citados ha sido convenientemente balizada y señalizado de conformidad con la normativa vigente, distinguiéndose en ella tres áreas perfectamente diferenciadas:
1.- Área A, cuya delimitación y régimen jurídico se fijan en el artículo 2.
2.- Área B, cuya delimitación y régimen jurídico se fijan en el artículo 3.
3.- Área C, formada por el resto de la zona de reserva marina no comprendida en los apartados anteriores, cuyo régimen jurídico queda recogido en el artículo 4”.


Cabría resaltar que el texto definitivo difirió bastante del que se había hecho público en primer lugar y que generaría múltiples preocupaciones entre los colectivos más directamente afectados. La prohibición de fondear en todo el área de la reserva fue sustituido por la autorización de hacerlo siempre que se deje caer el ancla sobre arena, nunca sobre las praderas de algueros, circunstancia a tener muy presente por los patrones que naveguen por la zona si quieren evitar la actuación de los diversos medios de vigilancia. Igualmente ocurrirá si se permanece en el área acotada con fusiles, arpones u otros equipos de cualquier modalidad de pesca que puedan generar dudas puesto que las sanciones pueden llegar a ser muy severas.




De entre todas las calas y puertos comprendidos en la reserva destaca la bahía de Fornells, en forma de amplio saco, estrecha y larga, de una superficie aproximada de 4,1 km. cuadrados y abierta al norte con una bocana de unos 300 metros de abra. Los fuertes vientos del norte, frecuentes en esta zona, determinan la circulación del agua en el interior de la bahía, tal como evidencia la distribución del sedimento. En su conjunto se trata de una bahía de aguas poco profundas, cuya media es de cinco metros y medio. Sus características hidrográficas más representativas desde el punto de vista biológico son el reducido hidrodinamismo, un rango de temperaturas extremo (aguas más frías que en aguas abiertas en invierno y más calientes en verano) y la elevada iluminación de toda su columna de agua. Mientras que la primera característica procede de la propia forma de la bahía, las otras dos son derivadas principalmente de su escasa profundidad. En grandes porciones, el bentos de esta bahía está representado por las comunidades mediterráneas típicas de estos ambientes: sobre los escasos sustratos duros y a poca profundidad, se desarrollan comunidades de algas fotófilas como Padina pavonica y Halimeda tuna. Sobre los fondos blandos dominan las praderas de las fanerógamas Posidonia oceánica y Cymodocea nodosa, esta última mezclada en la parte más interna de la bahía con el alga Caulerpa prolifera. La flora, fauna y recursos marinos de esta bahía son suficientemente conocidos debido a que fueron objeto de un seguimiento que se prolongó por espacio de diez años por parte de la Direcció General de Pesca y Cultius Marins, la Societat d’Història Natural de les Illes Balears y el C.S.I.C. (Centro Superior de Investigaciones Científicas). Las praderas de Cymodocea nodosa son las más densas y mejor conservadas de las Illes Balears.

“Área A. Artículo 2: Queda definida por los puntos geográficos que a continuación se indican y que serán materializados por medio de balizas:
1. La intersección de la línea de costa con el meridiano 04º 01’42 E (Cala Barril)
2. 40º 04’31 N 04º 01’42 E (balizado)
3. 40º 04’18 N 03º 58’06 E (balizado)
4. La intersección de la línea de costa con el meridiano 03º 58’06 E (Pla de Mar).
Dentro de esta área se prohíben cualquier tipo de pesca marítima, la extracción de flora y fauna marinas, el fondeo de las embarcaciones sobre las fanerógamas y el buceo con escafandra autónoma. La Direcció General de Pesca i Cultius Marins podrá autorizar la inmersión y la recogida de muestras de flora y fauna para usos científicos”.
Área B. Artículo 3: El área B queda definida por los puntos geográficos que a continuación se indican y que serán marcados mediante el fondeo de balizas:
1. La intersección de la línea de costa (Punta Negra de Fora) con el Escull de ses Salpes (Illa Sargantana).
2. 40º 02’37 N 04º 08’00 E (balizado)
3. La intersección de la línea de costa con el meridiano 04º 07’29 E (Punta de ses Salines).
Dentro de esta área se encuentran prohibidas cualquier tipo de pesca marítima, el fondeo de las embarcaciones sobre las fanerógamas y el buceo de escafandra autónoma. La Direcció General de Pesca i Cultius Marins podrá autorizar la pesca profesional de la modalidad de artes menores con las limitaciones que se fijan en el artículo 4.1, así como la inmersión y la recogida de muestras de flora y fauna para usos científicos”.
“Área C. Artículo 4: En el área C, que comprende el resto de la Reserva Marina, queda prohibida toda clase de pesca marítima y la extracción de flora y fauna con las siguientes excepciones:
1.- El ejercicio de la pesca marítima profesional de la modalidad de artes menores, con las artes y aparejos tradicionalmente usados en el área comprendida por la reserva, con las siguientes limitaciones:
a) El número máximo de anzuelos que se permitirán calar diariamente en la pesca de palangre será de 500 por embarcación.
b) Las mallas mínimas de las artes fijas de redes serán:
Asimismo, para el ejercicio de la pesca profesional dentro de la reserva marina será necesaria una licencia especial que librará o renovará anualmente la Direcció General de Pesca, una vez escuchadas las cofradías afectadas.
2.- El ejercicio de la pesca marítima recreativa desde tierra y embarcación con las siguientes limitaciones:
a) La Direcció General de Pesca establecerá, con carácter trianual, zonas de veda para la pesca deportiva desde embarcación y desde tierra, con una extensión mínima del 35% de la superficie de la reserva marina.
b) Se establece un período de veda para la pesca a la fluixa (desde embarcación) y al curricán, de superficie y de fondo, desde el 1 de abril hasta el 31 de agosto.
c) Se establece un período de veda para la pesca del raor (Xyrichthys novacula) desde el 1 de abril hasta el 15 de septiembre.
d) Queda expresamente prohibida la realización de competiciones.
3.- La toma de muestras de flora y fauna marinas destinadas a usos científicos, que necesitará una autorización expresa de la Direcció General de Pesca i Cultius Marins.
4.- La Direcció General de Pesca podrá autorizar la práctica del buceo. En tales casos estará prohibido a los buceadores, de escafandra autónoma o apnea (pulmón libre), portar, tanto en las inmersiones como en sus embarcaciones, cualquier tipo de instrumento que se pueda utilizar para la pesca o extracción de especies marinas. Queda absolutamente prohibida la captura y retención a bordo de las especies que se incluyen en el listado que aparece junto a la Orden (ofrecida a continuación). En el caso de producirse una captura accidental de algún ejemplar, deberá de ser lanzado al mar inmediatamente, tanto si está vivo, como si está muerto”.




Balizado de la Reserva marina.
Desde el 6 de marzo de 2001 se encuentró funcionando el balizamiento que servía de advertencia al navegante de que se hallaba en una zona de reserva marina y, por lo tanto, protegida. El siguiente paso fue la colocación de los fondeos necesarios en el interior de la zona B (puerto de Fornells), para que las embarcaciones que visitasen esta bahía no produjeran daños irreversibles con la utilización de sus anclas al lecho marino. Tal instalación fue reiteradamente anunciada por las estaciones costeras mediante sus "Avisos a los Navegantes".
Lo cierto es que no pasó mucho tiempo y las balizas, costeadas con fondos europeos, desaparecieran de sus puntos de fondeo para aparecer tiradas en un solar. Se dijo que era muy difícil mantenerlas dados los temporales que se producían durante los inviernos. Difícil de creer, cuando en el Mar del Norte y otros lugares del mundo, permanecen en servicio contra viento y marea. También desapareció la fondeada en el interior de la bahía de Fornells, donde tal escusa resulta inverosímil.

El tramo de costa acotado para llevar a efecto el establecimiento de la Reserva podría definirse sin temor a exageraciones como extraordinariamente espectacular.


Limitado en su extremo oriental por la prominente Punta des Morters, en la base de la Mola y orientada descaradamente al norte, continúa con la bahía de Fornells, núcleo de pescadores por excelencia, que contiene en su interior la zona B de la reserva, que define su especial protección a las comunidades herbarias de su franja de levante (Cymodocea nodosa y Zostera nolti), así como las algas dotadas de rizomas que se asientan en los fondos blandos (Caulerpa prolifera, Flabellia petiolata y Halimeda tuna).

La zona B ha sido delimitada por los puntos geográficos Punta de ses Salines, Sa Selleta y una boya de color amarillo fondeada al SW de la Illa Sargantana. Se trata de una zona que suele ser habitualmente utilizada por todo tipo de embarcaciones de recreo que recalan en la bahía durante la temporada de verano. Esta zona, una vez establecida la reserva, ha quedado vedada para el fondeo mediante la utilización del ancla, por el claro perjuicio que entrañaría para las praderas sumergidas. Está estudiado por parte de la Conselleria d’Agricultura i Pesca el fondeo de muertos para que las embarcaciones que lo deseen puedan amarrarse a ellos.
La costa en la zona de la reserva
La bahía de Fornells es el enclave por excelencia de la costa norte de Menorca por la virginidad que presenta en la mayor parte de su ribera, por su belleza, por su idoneidad para la práctica de todo tipo de deportes náuticos en unas inmejorables condiciones de seguridad y por sus tradiciones pesqueras y culinarias.
En su margen de poniente y a media bahía se encuentra situada la urbanización Ses Salines, que alberga entre otros al Club Nàutic Fornells, con escuela de Vela (especializada en la clase Laser) y otra escuela privada que enseña a sus alumnos diversas modalidades de este deporte, entre los que destaca el windsurf. Cerca de la población de Fornells se encuentra otra escuela de Vela y un Aula del Mar, que muestra la vida y otros detalles de la rica geografía submarina de la zona.
Accesibles todos ellos por tierra, el Cap de Fornells, el Escull de Tirant y Sa Punta Mala (o Cap Anfós), conducen a la amplia bahía de Tirant, con un bonito recodo –Es Guix– con fondos de arena, hasta llegar a Ses Lloses de sa Punta Llarga, en cuyas inmediaciones embarrancó el carguero “Benil” en los años ochenta, teniendo que ser desguazado in situ. En la misma zona han quedado como testimonio numerosos restos de planchas, ejes y partes del motor que se encuentran recubiertos de una espesa capa de vegetación marina. Restos, por otra parte, que se deben respetar pues forman parte, ya, de la moderna historia marítima de Menorca.

Cala Tirant es accesible desde tierra por dos carreteras que conducen a sendas urbanizaciones, y contiene unos fondos de arena, con algunas altinas que pueden cambiar de sitio como consecuencia de los temporales. De todos modos, con vientos del N y NE suelen romper fácilmente haciéndose gracias a ello perfectamente localizables. En su margen W se suceden una serie de acantilados y macars realmente hermosos (Talaieta, Petit, Gran…) en cuyas inmediaciones es necesario recelar de los numerosos bajos y escollos que los circundan. Es Macar Gran es curiosamente de color completamente negro. Desde Cala Tirant puede accederse a todos ellos caminando por un sendero completamente pegado a la costa. Hacia el interior se requiere el permiso de la propiedad.
A partir de Es Macar Gran, salvo la pequeña playa de En Saler, la costa es acantilada con sondas de más de 10 metros pegadas a la misma. Destacan el Escull de Sa Satgetia y Cala Viola de Llevant. La Olla de sa Punta dels Ocellers es profunda y el Cap de Cavalleria con su faro de primer orden dominan una de las zonas más impresionantes de la Isla cuando es azotada por los furiosos temporales del primer y cuarto cuadrantes. Todas estas zonas suelen tener ganado lanar o cabrío suelto, que pasta por las «tanques» de las fincas, siendo recomendado cerrar en todo momento todas las barreras que se encuentren al paso y se tenga que acceder a través de ellas. La Illa des Porros (o de Sanitja), que es la zona de Menorca más septentrional, no tiene edificación alguna y muchos han sido los barcos que han sucumbido en sus erizados peñales en medio del fragor de la tormenta.

Navegando por la fachada de poniente de la península de Cavalleria, tras la pequeña playa de Cala Viola de Ponent, se accede al Port de Sanitja, de escaso calado pero protegido muy bien de los temporales a causa del freu que forma el islote conocido como Es Brau. Cala Torta es de escaso interés, aunque son hermosos sus límpidos azules.
La Punta des Vernís (que toma el nombre porque cuando se encuentra mojada su color se asemeja al de la madera oscura barnizada) conduce hacia unas playas situadas en un enclave natural bastante popular: Cala Rotja, donde es normal ver a las mujeres embadurnarse de su roja arcilla para tratar la piel, o las doradas playas de Cavalleria y d’en Farragut, separadas por el escollo que también lleva por nombre el de esta última. Son playas muy bonitas y su acceso por tierra se efectúa a pie, debiéndose de dejar los vehículos en un aparcamiento construido ex professo antes de llegar al lloc de Santa Teresa.


Entre la Punta d’en Farragut y Cala Mica existen varios pequeños macares, en una zona de costa muy sucia. En la Punta de Llevant de Cala Mica suelen practicar su deporte favorito –cuando las condiciones son las precisas– los aficionados al surf y el bodyboard, que de cada día aumentan en número, utilizando la zona de rompientes que conocen como “El Pico”. Cala Mica es hermosa y también de arenas doradas. No existe acceso público por tierra y a partir de su límite W comienza un área bastante sucia con escollos, lajas y costas escarpadas hasta llegar a Binimel·là, en que la costa pierde altura, forma rincones de arena hasta terminar en una playa que se encuentra precedida por un bajo de piedra más o menos en su eje y próximo a la orilla, del que es necesario recelar. Para acceder a la cala, de no navegar prudente y relativamente aproximados a tierra, es necesario tener en cuenta la presencia del escollo que lleva por nombre Sa Nau, a flor de agua y que con calma no rompe, siendo tan peligroso como para que algunos barcos hayan terminado en el mismo sus días de navegación. Esta cala tiene acceso desde el Camí de Tramuntana, del término de Es Mercadal. Casi en su extremo de levante, en la playa de Binimel·là desemboca un torrente que suele estar habitado por una colonia de patos. Toda la zona de costa es sobria, elegante y salvaje. Son áreas protegidas y forman parte de la esencia pura de Menorca.

Le sigue Cales Morts, que es un macar salpicado de bajos y Cala Pregonda, uno de los parajes por excelencia de Menorca y que ha conservado por el momento todo su esplendor. En su interior se encuentran las playas de Son Mercadonet, de Salairó y Pregonda, todas ellas de arenas doradas. Los mismos escollos forman parte de su agreste paisaje abriéndose paso a la navegación únicamente entre los que llevan por nombre Escull Llarg y Escull Pregondó. Aunque lo aparente a simple vista, no es en modo alguno un fondeadero seguro para pasar la noche. Queda completamente a merced de los vientos N, NE y E y son numerosos los patrones de embarcaciones de recreo que han tenido que salir y afrontar el temporal en plena noche salvo riesgo de naufragar.
La costa que le sigue es alta y acantilada hasta Cala en Calderer. El primer lugar digno de mención por su belleza y ser lugar de nidificación y cría de diversas especies de aves marinas es la Illa de ses Bledes, cuyo paso por tierra no se recomienda salvo a quienes lo conocen perfectamente debido a ser muy sucio con grandes bloques de piedra sumergidos, escollos y lajas.
Entre el Cap de Salairó y la Illa des Coloms se accede a Cala Barril, un remanso que no tiene otra salida que la misma por la cual se ha entrado y que forma el límite por levante de la zona A, principal núcleo de la reserva marina. Es la zona que se encuentra más protegida en la que no se puede practicar la pesca deportiva de ninguna modalidad, ni practicar el buceo sin permiso expreso de la Conselleria.

Los llamados Vermells de Sant Jordi son, como su nombre indica unos acantilados rojizos, que pertenecen al lloc de Sant Jordi, que no pierden altura hasta llegar a la arena de la playa de Cala en Calderer. El margen de poniente de esta cala pertenece al lloc de Son Ermità, del término municipal de Ferreries (hasta este punto, toda la zona de la reserva pertenece a Es Mercadal). El macar de Cala Moragues no reviste ningún interés y hay que recelar de un bajo que existe en el mismo centro de su eje de acceso. En su margen W existen aún los restos de un yate de aluminio que naufragó cerca de Cala Barril y, aunque sus tripulantes lograron llegar a la cala y no sufrir ningún daño, el barco continuó su camino arrastrado por el temporal hasta estrellarse en la Punta de Cala Moragues.

La costa, desde este punto hasta el Macar dets Alocs es alta y escarpada, sucia pegada a tierra y sin puntos dignos de mención. Todo esta zona es muy apta para el alevinaje y reproducción de muy diversas especies por ser sus fondos de roca, grandes bloques de roca, que permiten muchas cuevas y recovecos donde habitar y pasar su etapa juvenil muchas de ellas. Los acantilados constituyen los Penyals de Binidalfà. Ets Alocs es accesible por una carretera en sus tres cuartas partes asfaltada, que arranca desde la carretera general Maó-Ciutadella. Del Macar dets Alocs hasta la Cala del Pilar la costa va descendiendo, entrando en el término municipal de Ciutadella de Menorca, mientras las aguas continúan pobladas de bajos e islotes. Cala del Pilar es igualmente de arenas doradas y tiene situado frente a ella un islote conocido como Illa del Pilar. La finca Alfurí, donde está ubicada y la playa pertenecen al Ministerio de Medio Ambiente, por lo que es de titularidad pública, siendo accesible perfectamente por tierra a partir de la carretera general Maó-Ciutadella. Separa Cala del Pilar del Macar de sa Teula una colina de fuerte color ocre y de forma singular. El Macar de sa Teula está formado por los cantos rodados de mayor tamaño de la Isla los cuales han provocado siempre la curiosidad de todo el mundo. Del mismo tipo, aunque mezclados ya con grandes piedras de formas irregulares, se pueden contemplar también en el Macar d’Alfurinet que se encuentra a continuación. En este punto termina por tierra la zona A de la Reserva.
El margen W del Macar d’Alfurinet está limitado por la impresionante falda de la Muntanya Mala, donde se encuentra el acantilado de mayor altura de toda la costa de Menorca. Terrenos completamente vírgenes que incluyen la Falconera d’Alfurinet, Penyals de sa Falconera y tras formar una suave curva una vez doblado el denomimado Penyal de l’Anticrist, al pie de un alto acantilado, se encuentran el Caló d’Alfurinet, Racó de ses Xàvegues, Caló d’en Sintes, Racó des Llenyam, Racó de s’Aram, Racó de s’Alga y se llega a un promontorio muy redondeado y marcable desde grandes distancias, tanto navegando por levante como por poniente al sobresalir netamente del perfil costero de la Isla, que recibe el nombre de Cap Gros (o Capell de Ferro). Ahí, precisamente, queda limitada por su margen oeste la Reserva Marina del Norte de Menorca (Las magníficas imágenes submarinas que ilustran esta entrada son obra del reconocido fotógrafo submarino de Ciutadella Manolo Mora Canet, quien ha dedicado gran parte de su vida a fotografiar la vida de los fondos submarinos de Menorca. Las imágenes de superficie son de Paco Buenaventura y del propio autor).

Normativa general en las Reservas Marinas de las Illes Balears